Vertí mi copa sobre tus labios secos
para convertirme
de ti la pócima refrescante
para convertirte
de mí el depósito
de anhelos.
Month: Jan 2015
Cuarenta y dos
La cera de mi cuerpo se cae
desarmando mi espigada estructura
victima del calor
La luz de mi mecha es inestable
lágrimas derretidas
corren por mi cuerpo
Sin embargo
Soy algo más que
mi desordenado aspecto
sobre el candelabro
Soy la luz que ilumina el portal que divide
tinieblas de conocimiento
soledad de miseria
amor de eternidad
Cuarenta y uno
Estar cansadx
al punto de declararse incompetente
no ya por falta de energía
sino por irreparable fatiga de material
esclavitud moderna
La escritora
Soy la escritora intrusa. Aquella que revela lo que otros no quisieran ver públicamente. Soy la que recuerda lo que nunca sucedió. Soy la escritora que observa con detención y luego dice frases que nadie sabe complementar o contestar. Soy la que narra hechos con la delicadeza que no se nota en el cotidiano. Soy la escritora que necesita ojos, sonrisas y gestos en los rostros para convertirlos en letras e inmortalizarlos en textos basados en hechos que, según mi antojo, son reales.
Soy la escritora que calma la necesidad de transformar la realidad a través de piezas que siempre se ven más bellas en papel que en vivo y en directo.
En resumen y sobre todo
Soy la escritora que no sabe quién es cuando escribe.
Bandini
Soy Antonio Bandini. En el fondo siempre lo he sido. Sin embargo, no había querido caer en cuenta de que también soy las naranjas que le quitan el hambre y los dólares que le faltan en el bolsillo. Soy Camila, la mesera cuyo amor no lo alcanza y la señora que le cobra la renta sabiendo que Bandini no tiene un peso, sino que tiene letras fracasadas que compartirle al mundo. Los Bandini nunca viviremos de nuestras letras, lo sabemos. Pero viviremos para alimentar el sueño que montamos al plasmar cada letra en el papel que mantiene viva la esperanza. Por fortuna, los Bandini no escribimos para que nos ame el mundo, escribimos para salvarnos de él.
Cuarenta
La verdad es una ilusión
un presentimiento
una corazonada
un instante de lucidez
Claridad
en medio de la oscura
falsedad
de tus labios
Treinta y nueve
Lluvia cae sobre mi cabeza
germinan las semillas de mis versos
se erigen los tallos de mi poesía
fértil es la tierra de mis sentimientos
cuando la baña la lluvia
Treinta y ocho
Los besos que no se dan
coexisten en algún lugar
nos penan queriéndose entregar
mas sufrimos
pues no se sabe a dónde van